lunes, 13 de octubre de 2014

la tarta de manzanas de la abuela del Pato Donald




Que sì que sì, que no es solo un dibujo, existe de verdad!!!

La tarta que la abuela del Pato Donald solía poner a enfriar sobre la ventana de la cocina, quien no la recuerda?

Pues es realidad, se puede acer en casa...




Ingredientes:

Para la masa brisa

450 gramos de harina,
225 gramos de mantequilla,
una pizca de sal,
100 ml de agua fría de nevera


Para el relleno

seis manzanas, mas o menos un quilito,
100 gramos de azúcar,
dos cucharadas de zumo de limón,
una cucharada de maicena,
una cucharadita de especias mixtas (canela, clavo, nuez moscada, jenjibre... en mi bote de especias hay también el cilantro molido, pero esto va al gusto)


En la amasadora mezclamos a baja velocidad la harina con la sal y la mantequilla. Si no tenemos amasadora nos vale también, y tanto, un robot de lamas con el bol grande.
Paso seguido, añadimos el agua y terminamos de amasar. Si utilizamos robot pasamos la mezcla en un bol grande o una plancha de madera en monticulo y amasamos el agua con las manos, hasta que esté bien uniforme, sin calentar demasiado.
Reservamos en nevera el tiempo de preparar el relleno.

Ponemos en otro bol las dos cucharadas de zumo de limón, vamos limpiando y cortando las manzanas en trocitos, añadimos en el bol y mezclamos poco a poco con el limón.
Añadimos también el azucar, la maicena y las especias, mezclamos bien pasamos al microondas unos quatro o cinco minutos.
La maicena no tiene que volverse densa, lo harà luego en el horno.

Precalentamos el horno a 160/170 grados -hay que conocer bien su proprio horno...-

Sacamos la masa de la nevera y preparamos dos discos, uno mas grande para cubrir un molde de unos  25 cm de diametro y el otro mas pequeño para tapar.

Forramos bien el molde con papel de horno (o untamos con mantequilla y harina) y con el primer disco, rellenamos con el preparado de manzanas, cubrimos con el segundo disco y pinchamos bien los bordes, para sellar.

Hacemos unos cortes en forma de estrella en la masa, para que salga el vapor que se vaya formando y pasamos en el horno caliente por 40 minutos mas o menos.

Diez minutos antes de apagar, untamos la superficie con leche o yema de huevo, para que coja un bonito color dorado.

Lo mejor es comer cuando sea templadita, con o sin nata montada o agria, helado de nata... un chorrito de ron...












miércoles, 17 de septiembre de 2014

La Pasta alle vongole 2.0



Los espagueti con almejas... sencillo no?

Mmmmneh... menos de lo que se puede pensar si se quiere algo de sabrosito, que hay trucos y un poquito de trabajo.
Nooo, que va, no tanto como para salir al restaurante a comerlos (y luego donde, por aqui???), pero lo bastante como para calcular unos 40 minutos, mas el tiempo para el remojo de las almejas en agua y sal.






Los ingredientes para cuatro personas:

-1Kg de almejas
-una caja de tomates cherry bien maduros (200/250 gramos)
-400 gramos de espagueti numero 7 (o bavette, también), los Barilla llegan, aunque no suelen ser los mas apreciados en Italia.
-2 dientes de ajo
-un vaso de vino blanco
-aceite de oliva virgen extra, sal gruesa, pimienta y, si nos gusta, una pequeña guindilla
-perejil al gusto

-Una olla para la pasta, una sartén para las almejas y otra sartén para los tomates. Un colador de tejido o de metal muy fino.

Cortamos los tomates por la mitad.

Abrimos las almejas en una sartén tapada, con aceite de oliva y un diente de ajo que aplastamos con la mano o con el fondo de un vaso,  a fuego medio alto, unos cinco minutos mas o menos. Una vez que estén abiertas añadimos el vino blanco, dejamos un par de minutos mas a buen fuego y apagamos.

Separamos las almejas del caldo, que filtramos en un colador de tejido, para eliminar cualquier resto de arena. El caldo vuelve en su sartén limpiada con un papel de cocina e se reserva.

Eliminamos las valvas de las almejas y reservamos (un pinche puede ser útil...)

Ponemos la olla al fuego con agua por los tres cuartos.

En la otra sartén ponemos los tomates en aceite y ajo con la parte cortada hacia el fondo, para que caramelizan bien a fuego vivo. Reservamose




Cuando el agua herva, echamos los espagueti con cuanto sirva de sal.
Apenas estén blandos (no cocidos!!!! solo blandos!) reservamos un buen bol de agua de cocción, escurrimos y terminamos de cocer en la sartén con el caldo, añadiendo poquito a poco el agua.

Los espagueti de la foto de abajo están crudos por dentro!!!




Es también el momento de añadir la guindilla troceada, si nos gusta.
Dejamos cocer a fuego medio alto hasta que estén al dente, sin dejar que se sequen (tenemos el agua de cocción).

 


Una vez que esté al dente (apenas durito por dentro) añadimos los tomates y las almejas, la pimienta recién molida y salteamos hasta que se colore con el jugo de los tomatitos.
Espolvoreamos de perejil picado al gusto y listo!




domingo, 1 de junio de 2014

Bruschetta alle melanzane - Montaditos de berenjenas y queso griego






Estuve de viaje en mi tierra, con mi hija, y volvimos en en viejo coche que tenía ahi. Fue un bonito viaje, en tres etapas, y claro, aproveché para traerme cositas buenas desde Italia y Francia: semillas de albahaca de Génova, de rúcula, de puntarelle, especias, regaliz puro, Carambar...
Nos paramos a dormir en Vitoria, en un hotel de diseño que nos encantó por la decoración y por el servicio y donde comimos estupendamente sin gastarnos el equivalente de un riñon: unos pimentos rellenos tan suaves y sabrosos... miam!

Así me quedo con ganas de verano y de Mediterráneo (que aquí arriba hace un frío!) y ayer por la noche preparé unos montaditos jugosos y totalmente sureños.




Ingredientes:
un pan de pais cortado por el largo y tostado en el horno hasta que empiece a tomar color
1 o 2 berenjenas agujeradas y pasadas en el horno a 175 grados durante unos 30/40 minutos, hasta que estén blanditas
100 g. de queso griego feta desmigado 
15 tomates cherry bien maduros cortados finos
15 aceitunas negras sin hueso trituradas
un manojo de rúcula
sal, pimienta, pimenton (dulce o picante al gusto), un diente de ajo si queremos y un buen aceite de oliva virgen extra





El ideal es cocer las berenjenas el día antes, que poco trabajo lleva: se agujeran con un tenedor y al horno...

Preparamos los tomates y las aceitunas. Pasamos el pan cortado en el horno.

Mientras tanto, en un plato hondo vaciamos la berenjena con una cuchara, desmigamos el queso, añadimos tomates y aceitunas, el pimentón, el aceite, salpimentamos y mezclamos todo con un tenedor. Reservamos.





Sacamos el pan, frotamos si queremos, con el diente de ajo (yo sí quiero!) y untamos con un buen espesor del preparado de berenjenas.

Cortamos en tiras y dividimos en los platos, añadimos la rúcula, aliñamos con mas aceite y sal y ya... 

Sencillo, rapido y jugoso.





martes, 6 de mayo de 2014

Manzanas del Amor






En Francia las manzanas acarameladas se llaman muy romanticamente pommes d'amour...
me parece muy bonito, y pensar que, en caso de falta, un poco de amor sea asequible por un par de euritos siempre viene bien!

En Estados Unidos suelen ser típicas de Halloween, pero en el viejo continente se encontraban en las ferias campestres y en Francia en las boulangeries -panaderias- bastante a menudo.

Lo que suele dar miedo es el caramelo, y que no se hacer, y que se me quema, y que me queda cristalizado...
La cura por el panico de caramelo es la paciencia y el matadolor es el termometro alimentar.
Desde luego se puede elegir de vivir peligrosamente sin termometro y todo nos puede salir de maravilla!

Dos advertencias importantes:
-Ni se le ocurra a nadie de pegarle un mordisco a las manzanas si lleva aparatos ortodonticos
-El caramelo QUEMA terriblemente, ojo!!!





Los ingredientes:
8 manzanas, lavadas y sin pedúnculo
800 gramos de azúcar normal
160 ml de agua
50 gramos de miel o de glucosa (también puede ser jarabe de maiz)
canela, vainilla y clavo u otro aroma al gusto (yo puse una gotas de aroma de chicle de Lorann)
colorante rojo (facultativo, claro, pero el amor???)
8 palillos chinos (los para brocheta no nos valen, las manzanas pesan y no aguantarían)
un cazo estrecho y profundo con el fondo bastante grueso

Pinchamos los palitos en las manzanas bien lavadas y reservamos sobre una bandeja cubierta de papel siliconado.
Ojo porqué las manzanas nos soltaran un poco de liquido por el agujero, es mejor secarlo con papel de cocina para evitar que al bañar las manzanas en el caramelo, si se caen unas gotas de zumo frío nos vayan a fastidiar.

Ponemos a fuego lento el azúcar con el agua y cuando empiece a disolverse añadimos la miel (glucosa, jarabe de maíz...) y cocemos sin mezclar hasta que alcance los 100 grados c. 




Una vez llegados a esta temperatura añadimos los aromas y el colorante (si es en gel nos tocará remover un poco para que se integre) y nos ponemos con calma a esperar de ver los 150 grados marcados en el termometro (tenemos de sobra el tiempo de vaciar la lavavajillas y volver a cargarla...)
Otra solución es de dejar caer unas gotas de caramelo sobre un plato frío y ver si endurece bastante rapido guardando forma de bolita (es muy empirico pero bastante fiable: para saber mas leer aquí)







Llegados a la temperatura correcta, sacamos el cazo del fuego y rapido pero calmamente bañamos nuestras manzanas en el caramelo, hasta que sean completamente cubiertas, y ponemos a secar sobre la bandeja cubierta de papel o una rejilla durante unos diez minutos.

No se conservan muchísimo, unos tres días como máximo si las ponemos en bolsitas aptas por alimentos para que no coja humedad el caramelo.

También les podemos echar unos sprinkles o pegar unos ojitos de azúcar cuando el caramelo siga pegajoso, pero son tan bonitas "desnudas"...







De paso: Pinterest volvió a cambiar de sistema para que podamos añadir el botón a las fotos:
le damos al cuadradillo arriba a la izquierda, vamos al fondo en "for business" y un clic.
Se nos abre una pagina con cuatro opciones: Get starded, Basics etc; le damos al ultima opción, Tools, y por fin ahi encontramos el utensile Pin Button. Y gracias por cumplicarlo cada seis meses... :D

viernes, 21 de febrero de 2014

Los Falafel


Los Falafel son unas albóndigas de origen arabe, a base de garbanzos, cebolla, ajo, cilantro o perejil y especias. Se han vuelto comunes con los restaurantes de kebab, y la verdad es que son superfaciles de preparar y baratas. Lo que sí, hay que calcular el remojo de los garbanzos secos el dia anterior y el descanso de la masa (un par de horitas).

Para 30/35 falafel sirven:

-300 gramos de garbanzos secos
-una cebolla mediana (80/100 gramos)
-uno o dos dientes de ajo
-un puñado de hojas de cilantro o de perejil (el cilantro hay quien no lo soporta, pero para mi en algunos platos orientales es perfecto, como por ejemplo en los curryes rojos de gambas...)
-una punta de cominos, molido o en semillas (o ambos)
-una cucharadita pequeña de sal.




El día antes ponemos a remojo los garbanzos con agua abundante. Algunos aconsejan añadir una pizca de bicarbonato para que queden mas tiernos, otros alegan que el bicarbonato haría que los aminoácidos de los legumbres se volverían con este truco menos asimilables. Yo, como siempre me olvido, no sufro entre las dos versiones...

Cuando sean hinchados los secamos bien con un trapo de cocina o con papel y los pasamos en el robot con los demás ingredientes. Como la taza de mi robot es pequeña me toca hacerlo en tres veces, para que se pique bien todo.
Saldrá una mezcla como la que se ve en la foto abajo.

Dejamos descansar un par de horas como minimo en la nevera, cubierto con film alimentar o con un plato.




Paso seguido formamos unas albóndigas, de la forma que nos guste, prensando bien la masa en la mano.
Si queda compacta y no se desmiga con demasiada facilidad bien, en caso contrario podemos añadir una cucharada de harina. Yo nunca necesito hacerlo, en realidad.




Freímos -en freidora a 160/170˚- hasta que estén bien doraditos, dando la vuelta si necesario, entre cuatro y cinco minutos, según el tamaño.
Pasamos sobre papel de cocina para secar el aceite que quedara (no absorben mucho, porqué hacen enseguida una costra bonita y se quedan blanditos por dentro).

Se comen como entrante o comida ligera (pero completa), sobre una ensalada mixta, sazonado con una vinagreta de mayonesa o se pueden servir en una fiesta en conos de papel con diferentes tarritos de salsas para acompañar, al estilo de la comida callejera.





jueves, 20 de febrero de 2014

Le Chiacchiere









En cada región de Italia las orejas de carnaval tienen un nombre diferente: chiacchiere, bugie, frappe, gale, cenci...
Literalmente en italiano chiacchiere significa charla, tertulia, en sentido no serio y para nada académico, sin llegar a ser pettegolezzo, cotilleo.
Las chiacchiere no tienen forma de oreja, suelen ser rectangulares, con un corte o dos en el medio, a través del cual se pasa un extremo de la masa y se obtiene una forma torcida.... hummm, parece complicado... pues no, para nada, mirando las foto ya va a quedar clarísimo:







El corte hace que no se forme una burbuja demasiado grande al freír, porqué de esta manera, al ser la masa mas friable y quebradiza de la que se suele utilizar para las orejas, no se desmigan con demasiada facilidad al comerlas y manejarlas.
La vuelta no es obligatoria, dicho sea, es mas un recuerdo de infancia que me queda pegado al corazón...




Además no llevan leche en la mezcla ni anís, sino aguardiente, ni canela, mas porcentaje de huevos que en las recetas clásicas españolas.


Para las que hice los ingredientes son:
-500 gramos de harina con pocas proteinas (la Gallo de toda la vida, o una harina para dulces)
-50 gramos de mantequilla
-4 huevos medianos a temperatura ambiente (si son pequeños o la masa quedara dura añadir una yema)
-85 gramos de azúcar blanquilla
-una pizca de sal
-una cucharada de extracto de vainilla o la ralladura de un limón, al gusto
-un buen chupito de aguardiente o de limoncello para las chiacchiere y otro limoncello (licor café?) para la cocinera/cocinero, que no se toma nunca alcohol a solas, ¡que es tristísimo y le chiacchiere se deprimen con facilidad!
-aceite para freír
-azúcar glas para espolvorear
-un litro de aceite para freír (yo utilizo el de Mercadona con la botella roja, que lleva aceite de mais y girasol alto oleico o el Koipesol. Esto porqué no me gusta el sabor del aceite de oliva en los dulces. En Italia prefería el de cacahuete, que resiste a temperaturas mas altas antes de deteriorarse, pero aquí no se encuentra con facilidad.  Lo mejor queda el de oliva, que tiene un punto de humo mas alto, peeero...)

Seguro que si se cambia el aguardiente para el anís no pasará nada, solo que en mi casa el anís no tiene muchos estimadores...





Bueno, yo como siempre amaso en mi kenwood, con la lama de gancho en este caso, todo junto, empezando con la harina. Hai recetas que añaden una cucharadita de levadura tipo royal, por deber de información. A mi me parece innecesaria, no le veo la diferencia.
A la mano pide un poco mas de tiempo y esfuerzo, pero la masa no debe ser demasiado dura, así que se puede hacer sin miedo: un monte de harina, un hueco en el medio y huevos, mantequilla (blandita en este caso mejor) y lo que queda de ingredientes.

Una vez que tengamos una linda bolita, dejamos descansar una horita en el bajo de la nevera o en lugar fresco, que aún es invierno.

Paso seguido, la freidura: dividimos la bolita en ocho partes, y la pasamos en la maquina para pasta, si tenemos, o nos conformamos con el buen, viejo y fiel rodillo.
Tendemos la masa en espesor de un par de milímetros y cortamos unos rectángulos de 10/12 centímetros para 5/6. Un corte en el medio y le damos la vuelta pasando dentro del corte.

Se frie a temperatura medio/alta, en la freidora puse 180˚: deberán de tomar color poquito a poco, y salir rubias, no morenas...
Pasamos sobre papel para fritos y espolvoreamos de azúcar glas mientras sigan calentitas.

Una nota sobre el espesor: a mi me gustan mas finas, casi transparentes, y a una de mis hijas mas espesas: con maquina para pasta anduve bailando entre el numero 7 el 9... esto a vosotros de probar... de toda manera las mas espesas no quedan duras, prometido jurado.












martes, 11 de febrero de 2014

El Pesto (genovés) Orensano







El pesto es un adobo para la pasta de origen ligure. Tradicionalmente preparado en un mortero de marmol con el pilón de madera, en donde se machacan el ajo con unos granos de sal gruesa, se añade el albahaca, el parmesano y el queso de oveja curado (pecorino) rallados y en ultimo el aceite de oliva virgen extra hasta obtenir una crema.

Esta entonces es la tradición, con ingredientes DOP, o sea albahaca ligure, que no tiene aromas mentolados, ajos de Vessalico, ligures tambien, de sabor delicado, aceite de olivas taggiasche y todo el patatí patatá.

Aqui el albahaca ligure no se encuentra a la venta, pero hay unos manojos estupendos de albahaca normal y corriente en el Gadis del Ponte Vella, así que no nos hacemos faltar el pesto casero, que sí, es muy diferente del pesto de bote.

La pasta que se ve en la foto también es tradicional de Liguria, se llama "trofie": un tallarín torcido, largo entre tres y cinco centimetros. Yo aun no las encontré en el comercio en Ourense, pero se que hay una tienda de productos italianos en Vigo, a lo mejor ahí las tienen. Se suelen hervir con patatas y judías verdes y luego sazonar con el pesto, ablandado con una cucharada de agua de coccion.
Claro está que se pueden preparar a mano, si alguien quiere ser perfeccionista y sorprender su pareja para San Valentin, pero será mejor ser solo dos comensales, muy muy enamorados y luego con poca hambre, que cada trofia se trabaja con un trocito de masa de la grosor de un garbanzo, con un movimiento de mano y muñeca de ida para adelante y vuelta atrás hacia el lado... bueno, mucho tiempo para aprender y aun mas para dos platos!

Así que unos tallarines, espagueti o penne serán lo mas abordable, si queremos también tener tiempo para ponernos guapas/guapos. Que si, que los hombres de hoy en día son buenos cocineros!






Mi pesto casero sin ingredientes DOP itálicos:
-un diente de ajo morado o blanco, suave, descorazonado
-50/60 gramos de hojas de albahaca, limpias y secas
-70 gramos de queso parmesano rallado de sobre (o 50 de parmesano y 20 de oveja curado)
-50/60  gramos de piñones buenos (son caros, pero vale la pena invertir para comerse un buen pesto. Nada de anacardos, a lo mejor nueces, si queréis experimentar... pero el sabor no será ni parecido)
-una pizca de sal fina
-medio vasito de aceite de oliva virgen extra suave







El mortero es muy romantico y hace profesional... bueno, yo robot.

Y para no quemar las hoyas de albahaca las añado al final.

En el robot picamos los piñones con el queso y el ajo.
Añadimos la mitad de las hojas de albahaca, la sal y picamos nuevamente, a toques, hasta que la mezcla esté teñida de verde.
Luego la otra mitad de hojas, el aceite y terminamos de picar, sin excesos , para que no se manifeste el aroma mentolado de la hierba.

Estas dosis llegan bien para ocho personas, pero se conserva unos diez días en la nevera cubierto de aceite, para que no se oxide, o también se puede congelar en pequeñas porciones, para que sea mas rapido descongelar al momento oportuno.